Después de tanto tiempo acá estamos. Te reconozco como si te hubiera conocido desde siempre. Yo se que tú también sientes que me conoces. Bueno, comenzaría por contarte un poco de mí, aunque en este caso prefiero que lo averigües tú.
viernes, 1 de julio de 2011
Envidia
A poquitos vas robando mi pureza
mi sombrero tejido.
Abriéndote camino por mi espalda
vas directo al corazón.
Con ácida intención
y descarada inteligencia.
Verde enredadera en mi lengua,
has buscado la cerradura perfecta.
Con tu falsa verdad me hiciste un mundo,
un color de muerte lenta,
podrida emoción.
Negando tu destino vas,
envistiendo de locura mi noción,
provocándome con furia te acercas
maldiciendo mis horas
arrastrándome a tu oscuridad.
Milagro.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario